miércoles, 18 de mayo de 2011

TRANSPLANTE DE CADERA


A partir de los 65 años de edad las personas son más propensas a sufrir fracturas de cadera o sufrir desgaste en ella.

A esa edad las personas suelen verse afectadas por enfermedades que atacan a los huesos como la osteoporosis o la osteopenia, las cuales vuelven a los huesos más susceptibles a las fracturas, debido a que estas enfermedades descalcifican y debilitan los huesos, a la vez que se va perdiendo masa ósea a medida que pasan los años. También la artritis es una enfermedad típica que afecta a los huesos.


Estas enfermedades de los huesos son incurables, se puede mejorar el estilo de vida de las personas con tratamientos y medicamentos, sin embargo es impórtate prevenirlas desde temprana edad aportando mucho calcio al organismo. Se puede hacer consumiendo alimentos como lácteos, sus derivados y huevos, ya que estos son ricos en calcio. También se puede optar por comprar en la farmacia calcio en polvo y disolverlo en agua, juegos de frutas, sopas etc… o mezclándolas con otras comidas sólidas.

La osteoporosis es muy común que ataque  a las mujeres después de la menopausia, por eso es recomendable un tratamiento para reforzar los huesos antes y después de esta época de la vida de la mujer. Las mujeres son más propensas a estas enfermedades en los huesos debido a su paso por diferentes etapas “especiales” de la vida, como son el embarazo, la menstruación, la lactancia y la menopausia. En éstas se pierde gran parte de calcio y hierro.
Una vez que los huesos están descalcificados son muy comunes las fracturas. Estas fracturas pueden venir de un pequeño golpe o de hacer un esfuerzo al levantar algo pesado. La cadera es la más afectada, ya que esta sostiene todo el peso del cuerpo y además es el principal apoyo al caminar.


En el caso de sufrir un desgaste o un fractura de cadera el médico determinará si es necesario realizar una cirugía de transplante de cadera, en la cual coloca un implante o prótesis que puede ser una prótesis total o parcial. Ésta dependerá del caso de cada paciente.

¿Qué diferencia hay entre la prótesis total y la prótesis parcial?

La prótesis total es la que sustituye la cavidad donde encaja la cabeza femoral. Estas se utilizan en el caso de que exista alguna enfermedad en las articulaciones, de esta manera se logrará eliminar el dolor y la incapacidad de movimiento.

La prótesis parcial es aquella que solamente sustituye la cabeza femoral. Estas son utilizadas en las fracturas de caderas con el objetivo de que el paciente recupere la movilidad rápidamente.
Las prótesis están elaboradas de diferentes materiales, las cuales varían en el precio de las mismas. Algunos materiales se desgastan más rápidos que otros y deben ser remplazados por otros con otras operaciones futuras.

¿Cuánto tiempo dura una prótesis de cadera?

La duración de las mismas es de aproximadamente entre 15 y 20 años, pero el tiempo de vida de estas prótesis dependerá del material con el que están elaboradas y de las actividades que realice el paciente.

¿Qué cuidados se debe tener después del transplante de cadera?

 

Son demasiados cuidados los que se deben tener después del transplante, pero estos cuidados asegurarán una recuperación más rápida y segura.

Los primeros 3 días se debe mantener reposo absoluto, solo se puede estar acostado en la cama o sentado de forma cómoda.

·         No cruzar las piernas estando sentado ni acostado.
·         No arrodillarte.
·         Evita agacharse y recoger cosas del suelo.
·         No realizar esfuerzos, ni levantar objetos pesados.
·         A la hora de asearse debe hacerlo en una tina de ducha. Lo ideal es colocar alguna barandilla para poder sujetarse y poner alguna alfombra que no resbale para evitar caídas.
·         No apoyar  la pierna que fue operada hasta que el médico lo indique. Una vez que el médico haya dado la orden se puede apoyar la pierna y ayudarse a con muletas o un andador.
·         Ser paciente es indispensable, pues la recuperación del transplante de cadera es algo lenta.

Es importante seguir las indicaciones del médico que operó para que la recuperación sea favorable. Tomar la medicación diariamente, así como realizar sesiones de rehabilitación para mejorar la movilidad de la cadera y fortalecer la musculatura ayudan en gran manera.




jueves, 5 de mayo de 2011

ENFERMEDAD DE MIKULICZ

 


Es una condición inflamatoria, usualmente benigna y crónica, caracterizada por el agrandamiento de la glándula parótida, lagrimal o salival que ocurre como una complicación de otra enfermedad, tal como un linfoma, leucemia, sarcoidosis y otras, con excepción de la enfermedad de Mikulicz. La causa exacta es desconocida, aunque puede que sea una variedad del síndrome de Sjögren diferenciándose de ésta por la ausencia de artritis reumatoide. Se diagnostica generalmente en mujeres de edad media o ancianas. Puede que tenga un efecto en las amígdalas y otras glándulas de la cara y cuello. 
El síndrome fue descrito por primera vez por Johann Mikulicz en 1888. Posteriormente, en 1952, Godwin propuso el nombre de Lesión Linfoepitelial Benigna. 


Las alteraciones glandulares características del síndrome de Mikulicz se caracterizan por hipertrofia del estroma de las glándulas afectadas acompañado con atrofia del parénquima secretor, resultando en hialinización y fibrosis Los infiltrados no supurativos de estas glándulas constituyen células—especialmente linfocitos —producidas por enfermedades no-Sjögren, como linfomas no-Hodgkins, leucemias o sarcoidosis, entre otras.
El síndrome de Mikulicz se presenta como tumefacción simétrica y no dolorosa de las glándulas de la cara, en especial las glándulas salivales, lagrimales y las parótidas. Al estar comprometida la función glandular, los pacientes con el síndrome de Mikulics experimentan sequedad en los ojos, boca y laringe.
  
Se presenta en adultos con una tumefacción lenta y progresiva de las glándulas salivares mayores y lagrimales. Algunas personas con síndrome de Mikulicz pueden experimentar fiebre recurrente. La hipertrofia es moderada, difusa y asimétrica, no dolorosa y se acompaña de xerostomía y disminución de la secreción lagrimal. Es posible la evolución a linfoma o carcinoma en un 5 -10% de los casos.

Es posible la evolución a linfoma o carcinoma en un 5 -10%. Los tratamientos a base de antibióticos y antiinflamatorios se utilizan en los brotes agudos que pueden empeorar la evolución. Se ha utilizado la radioterapia en dosis antinflamatorias, pero ésta puede dar una ulterior degeneración